La ermita de Nuestra Señora del Socorro es el único vestigio material del dominio que los caballeros de la Orden de San Juan ejercieron durante casi setecientos años sobre la villa de Población de Campos.
Originalmente, esta ermita era una capilla anexa a la desaparecida iglesia de San Pedro, un templo cuyas piedras fueron reutilizadas en 1661 para la construcción de la torre de la iglesia de Santa María Magdalena.
Construida en los primeros años del siglo XIII, la capilla del Corro o del Socorro destaca por su sólida fábrica de sillería de piedra caliza. Su estructura consta de dos espacios diferenciados, edificados en épocas distintas. En su origen, la capilla estaba conectada con la iglesia a través de un sencillo arco, y aún hoy se pueden ver restos del antiguo templo junto a ella.
El interior es austero, sin apenas elementos decorativos. Los capiteles presentan una ornamentación muy sobria, limitada a motivos vegetales, aunque los restos de los sepulcros medievales aportan un gran valor histórico. Entre ellos, destaca una lápida funeraria del siglo XIII.
La imagen gótica de la Virgen del Socorro, que antaño presidía la ermita, se conserva actualmente en la iglesia de Santa María Magdalena.
Pero antes de marcharte, quizás haya llamado la atención la extraña ubicación de la ermita, situada muy por debajo del nivel de la calle. Esto se debe a las continuas inundaciones provocadas por la cercanía del río Ucieza, que con el paso del tiempo fueron acumulando sedimentos y elevando el terreno. Entre 1973 y 1984, se llevaron a cabo excavaciones para recuperar el nivel original del suelo, desenterrando así la estructura que, hasta entonces, permanecía parcialmente oculta.